Mejorar tu salud es posible con una terapia a base de aromas, este tratamiento es ideal para las personas que buscan relajarse y mejorar su vitalidad.
Algo que debemos comprender cuando utilizamos aceites esenciales es justamente que, por su grado de concentración, son poderosos y deben ser utilizados de forma responsable.
Existe la idea equivocada de que los aceites por ser puros y de origen natural resultan completamente inocuos. La realidad es que, si bien no necesitamos ser especialistas para disfrutar de ellos, sí debemos tener precauciones. En caso contrario, podríamos tener efectos no deseados como irritaciones en la piel, cuadros de intoxicación o reacciones alérgicas.
Por eso en esta oportunidad, te dejamos algunas recomendaciones a tener en cuenta para un consumo seguro:
- Cuando vayas a aplicarlos en tu piel intenta que no sea de forma directa. Algunos aceites son muy fuertes y en exceso pueden generar irritaciones. Mézclalo con un aceite portador o vehicular de origen vegetal que no irrite la piel, como el aceite de coco fraccionado. También puedes diluirlo en agua destilada de uso cosmético, creando tu propia bruma termal; o simplemente lo adhieres en tu crema personal, como mencionamos más arriba.
- Aún habiéndose diluido, como con cualquier otra sustancia que pondrías en tu piel, siempre es mejor probarlos primero en una pequeña parte de tu cuerpo y ver cómo responde. Si provocara alguna reacción indeseada, debes lavar la superficie con agua y suspender su uso.
- Y ya que nos referimos a las partes de tu cuerpo, es importante saber que no todos los aceites pueden colocarse en cualquier lugar. Algunos pueden ser buenos en la piel de tus brazos y piernas pero no es una buena idea colocarlos en zonas más sensibles, como tu nariz, ojos, boca o partes íntimas.
- A pesar de que muchas veces se los utiliza en la gastronomía, su ingesta oral no es la forma más recomendada de consumirlos. Algunos aceites pueden tener grandes beneficios si los hueles o los aplicas en tu piel pero pueden traer serias complicaciones si los tragas.
- Es recomendable que siempre cheques la etiqueta y que consultes a tu terapeuta de confianza en caso de no estar seguro.
- Asegurate de estar comprando aceites de calidad, es decir, naturales y sin aditivos sintéticos. De otra forma, no podrás saber exáctamente qué es lo que contienen y si son seguros para tu cuerpo.
- ¿Cuánto tiempo dura un aceite esencial? En líneas generales puedes conservar un aceite hasta 3 años. Luego de ese tiempo puede que se echen a perder, presentando alteraciones en su aroma, color y hasta pueden causar alguna reacción alérgica.
- Ten en cuenta que ancianos, niños y embarazadas pueden ser más sensibles ante los efectos de un aceite esencial. Te sugerimos que no los utilices con ellos, salvo que un médico lo avale. Y si vives con niños, ¡ten la precaución de guardarlos en un lugar alejado de sus manitas y su curiosidad!
Ahora sí, estás preparado para disfrutar de todos los beneficios de los aceites esenciales. Recuerda que estas son sólo precauciones para un uso seguro. Si las respetas, eres libre de probar todos los aceites que creas necesario. Sólo interactuando con ellos conocerás cuáles se adaptan mejor a ti. Así que te deseamos un hermoso viaje de experimentación ¡seguro y placentero!